Mercaderes del miedo


Desde hace un par de años, nos hemos visto obligados a convivir con una terminología que había permanecido recluida en contextos alejados de nuestro quehacer diario: el lenguaje de las finanzas. Así, términos como subprime o nombres como el de Madoff son hoy intrusos que campean a sus anchas por nuestros hogares y nos acompañan a tomar una cerveza o a comprar el pan al súper. Con esta entrada pretendo acercar un poco de luz a uno de ellos, las agencias de valoración, que parecen ser el nuevo invitado a nuestra mesa cuando, en realidad, llevan mucho tiempo condicionando la misma.


Episodio 1: La gestión de la criatura.

En el año 2000, y tras el fracaso de las puntocom, un mercado tan tentador como efervescente, los grupos financieros de inversión apuntan hacia el sector inmobiliario, y confiados en una aparente fiabilidad del mismo, se lanzan a la especulación crediticia. Prestan dinero a constructoras y empresas promotoras de viviendas, para después hacer lo mismo con los compradores, buscando crear un mercado de beneficios rápidos, basado en la creencia de que el valor adquirido siempre superaría el valor de la deuda, hasta que en su afán depredador acaban yendo más allá de la línea de seguridad con la concesión de préstamos a bajo interés a clientes de dudosa garantía. La consecuencia era tan previsible que sólo su desmedida avaricia les impidió verla a tiempo, y aunque todos sabían lo que estaba por llegar, no estaban dispuestos a permitir que se les escapara ni una sola posibilidad de exprimir una situación que acabó por echárseles encima. Como uno de esos yonkis que se repiten lo del “una más y lo dejo. Sólo una más. Por una más, no pasa nada”, o como una ruleta rusa en la que la tentación de apretar el gatillo por última vez es mayor que el miedo a encontrarse con la bala, hasta que… BANG.


Episodio 2: Expota, expota, me expló.

El 15 de septiembre de 2008, una de las mayores entidades financieras del mundo, Lehman Brothers, hace catacroker. La burbuja inmobiliaria estalla, las bolsas se precipitan y especuladores e inversores empiezan a mirar hacia las ventanas de Wall Street, sobre las que parpadea un imaginario neón con la palabra Exit bien grande, mientras el pánico se desliza por sus espinas dorsales helándoles el alma y la cartera. Cuando la burbuja inmobiliaria, la misma que era alentada día sí y día también por los medios, la misma que los gobiernos permitían y contemplaban con la complacencia de Nerón cuando pegó fuego a Roma, acaba reventada como un gato en una autopista, comienza esa epidemia que el Sr. Presidente de nuestro país se negó a nombrar como crisis hasta que ésta le mordió el culo. Los valores adquiridos, las viviendas que siempre se iban a revalorizar, empezaron a valer menos que la deuda que representaban.


Y aquí es donde entran en juego las agencias de valoración. Apenas unas horas antes de que Lehman Brothers quebrara, la agencia Standard&Poor´s, una de las más poderosas y reconocidas del mundo, le había otorgado una calificación de AAA, la máxima posible. La labor de estas agencias es valorar, calibrar el valor de una deuda y la seguridad en cuanto a la amortización de la misma. A partir de ese día 15 de septiembre de 2008, fecha oficiosa del inicio de la crisis financiera, y en semanas sucesivas, las otras cuatro mayores financieras de Estados Unidos corrieron la misma suerte que Lehman Brothers. Curiosamente, también habían sido calificadas con AAA por Standard&Poor´s, así como por Moody´s y Fitch, las tres agencias que se reparten el monopolizado pastel de las valoraciones de deuda. La paradoja, o no, es que el 93% de las notas calificadas como AAA correspondían a auténtica basura crediticia. La conclusión de que estas agencias habían estado encubriendo la situación de sus clientes, protegiendo su buen nombre y sus inversiones, y por ende sus propias comisiones, surge tan certera como tardía.


Episodio 3: Aflojando la mosca.

Con un tejido financiero hecho un siete, a los gobiernos no les queda otra que hacer de Robin Hood con un ligerísimo matiz: la pasta se la quitan a los pobres para dársela a los ricos. Entre todos los bolsillos de los contribuyentes esquilmaron unos tres billones de euros y así salvaron los relucientes culos que previamente se habían cagado en todos nosotros. La vuelta a los números positivos resultó en un repunte bursátil, y cómo no, en primas desorbitadas para los ejecutivos de las entidades financieras rescatadas que, sin sonrojo, se pulían en viajes, hotelitos de a seis mil la noche y vicios personales. No hubieran reventado como ciquitraques los cabrones. Lo que no se suele decir, lo que no hay cojones a decir por vías oficiales, es que esta operación sirvió, además, para transformar el dinero que sólo existía en los ordenadores y documentos en dinero real, dinero que venía del estado, dinero LIMPIO, borrando así cualquier resquicio que de mierda sospechosa pudiera quedar en las cuentas de los bancos.


Episodio 4: La pelota cambia de tejado.

Así terminó la primera etapa de esta crisis, la de la burbuja especulativa, la que atañía principalmente a los que manejan la pasta, y el marrón pasó de las manos privadas, las de unos pocos, a la pública, las de todos. Los gobiernos tuvieron que emitir deuda pública para rescatar a los grandes bancos y a Wall Street, y es ahora, en este punto, donde acaban de volver a asomar sus sucias narices las agencias calificadoras para valorar esa deuda pública emitida, que genera, paradójicamente, unos enormes dividendos al sistema financiero.


La deuda pública es el mecanismo necesario que cualquier estado requiere para obtener recursos financieros y afrontar los gastos de la gestión de un país, y ésta se ve incrementada en contextos económicos como el actual. Así, los bonos estatales emitidos tienen un valor, adquirido a un precio determinado, que en el plazo que se establezca tiene que ser amortizado al comprador a ese mismo valor, con el añadido, naturalmente, de los intereses devengados. Como en todo préstamo, existe el riesgo de que el emisor de la deuda, el estado en este caso, no sea capaz de amortizarla. Y tal y como ocurrió al principio de esta crisis, son otra vez las agencias de valoración las que estiman el nivel de garantía de la inversión. Si dicha estimación es negativa, esto supondrá unas condiciones más severas para los emisores de deuda, ya que aquellos que la compran corren un mayor riesgo y endurecen el mercado. Es tan sencillo como que si yo, que voy camino de la indigencia, me acerco a mi banco a pedir tres mil eurillos, tendré que dejar por si aca mi riñón bueno en depósito en la nevera para riñones que tienen en la cámara acorazada (no, no la he visto, pero estoy seguro de que existe). Si por el contrario el que solicita el préstamo es Florentino Pérez, le dirán –“Anda, no te preocupes, que ya me los darás”.


Episodio 5: Uuuuhhhh

Hace unos días, Standard&Poor´s rebajó el nivel de calificación de la deuda de Grecia, o lo que es lo mismo, les dijo a los inversores que el gobierno griego estaba tieso y lo de prestarle los dineros no pintaba nada bien. Después, y en menor grado, rebajó también la de España (con un AA-, que vendría a ser un notable con tendencia negativa) y la de Portugal. No cabe duda, pues, que estas agencias manejan el valor de la deuda alterando los datos para obtener beneficios, que han ayudado a los bancos a esconder los riesgos de las inversiones que promocionaban mientras ellas cobraban sus comisiones, verdadero detonante de la crisis financiera, y que se teme que puedan estar haciendo lo mismo ahora con la deuda pública, pergeñando de la crisis el negocio del siglo y generando a su antojo efectos de contagio en las bolsas de medio mundo. Si aún os quedara alguna duda, apuntar que Warren Buffet, uno de los mayores especuladores bursátiles del mundo, es el dueño de Moody´s. Respecto al tema griego, y para concluir, puntualizar que al final europeos y americanos hemos tenido que poner la guita para que Grecia no quebrara*, y que Zapatero ha sido de los más generosos, por si después nos tocara a nosotros poner la gorra. De ahí que Obama llamara la semana pasada a nuestro presi a las cuatro y media de la madrugada (hora de aquí, claro) para ordenarle sugerirle que recortara el gasto inmediatly, enviándole además un amable séquito de men in black con el objetivo de llevarse el papeleo bien firmadito de vuelta a los USA.


Conclusión: Este mundo se maneja dentro de un sistema corrupto, perfecta y fatalmente dirigido, donde cada proceso económico responde fielmente a un plan trazado con minuciosidad desde esferas que ni tú ni yo alcanzamos a comprender, y esta crisis terminará cuando desde esas esferas se determine que debe hacerlo; cuando sea económicamente beneficioso para aquellos que, desde sus poltronas de hijos de puta (creo que se venden así en el Ikea), decidan que ya nos han chupado suficientemente la sangre. Por ahora.



*N. del A: Sí, los países quiebran, como las empresas. Y las ideologías, cualquier ideología, sólo son parte del aparato publicitario de aquellos que los dirigen. Si de mi dependiera, buscaría dos o tres empresarios honestos y apartidistas para dirigir este cotarro de Garzones, Belenes Estébanes, estatuts y matrimonios que son matrimonios pero, por dIOS, no pueden llamarse matrimonios. Y si los empresarios pudieran no ser españoles, mejor que mejor.


Imagen tomada prestada de aquí.

28 comentarios:

Anele dijo...
19 de mayo de 2010, 22:32

Joder con G...está no la leo ni aunque me comentes.....¡¡Por los cinco elementos...!! he tenido que dar seis veces a la rueda del ratón.

;)

Desclasado dijo...
20 de mayo de 2010, 9:08

Aunque conozco la historia, agradezco lo bien que la has escrito y sobre todo el toque de humor.
No queda sino reírnos, para lo de batirnos estamos ya muy resignados.
Muy bueno.

J. dijo...
20 de mayo de 2010, 14:35

Anele: Después de leer tu blog, no sé cómo tomarme lo de jugar con la rueda del ratón ;)

Desclasado: Gracias, Desclasado. Sé que conoces la historia. Sigo tu blog desde hace tiempo (la entrada con el e-mail de ZP es de lo mejor que he leído este año) y no se puede decir que no estés al tanto de lo que sucede. Me había comentado un lector que mis últimos post eran un poco breves, además de haber abandonado un poco la línea política con la que nació este blog, y quería escribir algo al respecto. Además, no todo el mundo está tan puesto en estos temas como tú y, para ellos, espero que pueda resultarles interesante, aunque no deja de ser una visión personal. Un saludo.

Desclasado dijo...
20 de mayo de 2010, 14:39

Gracias por las flores.
Al tema: a mí me suelen reñir por la longitud de las entradas, sin embargo cuando leo en otros sitios entradas largas, si son buenas las disfruto.
Por mí, mientras sigas teniendo buena pluma, ándale con las entradas largas.
Y sí, es cierto: más vale explicar todo con sencillez que dar a la gente por sabida.

Anele dijo...
20 de mayo de 2010, 22:42

había escrito esta entrada para mi blog...sin consideras opurtuno publicarla como comentario, ahí va:

Se nota, se siente….el miedo está presente.
Yace entre nosotros el desconsuelo del sentir popular.
Regeneramos nuestros odios pero nunca nuestras ideas.
Clamamos a golpe de tecla, a golpe de conversación.
Declaramos la estupidez, tiempo en mano de esos que se llaman gobernantes.
Trescientos cincuenta escaños que nos representan en plural mayestático…¿A mí?.
La mayor parte del año vacios.

Los ministros se reúnen para quitar las pelas al trabajador. Suma y sigue. Presupuestos, sumas y restas, multiplicaciones y divisiones.
A los Griegos cuna del conocimiento que se perdió…vaya usted a saber, donde.
Y nos han chuleado, sisado, y robado. Todos, unos miente, otros ponen el cazo y ahora se dedican a insultarse. Como siempre.
Y ¿Qué VAMOS HACER?
Ilustrar a los que nunca quisieron ilustrarse de los motivos y los por qués.
NO. SEÑORES HAGAMOS ALGO.
YO QUIERO SOLUCIONES, YO QUIERO SOLUCIONES, NO CONCLUSIONES

¡¡VOTA EN BLANCO!!

J. dijo...
20 de mayo de 2010, 23:17

Desclasado: Yo lo suelo pasar bien leyendo tus entradas. Y si son largas, lo normal es que lo pase largamente bien.

Anele: Publicado queda, aunque sin duda merece mejor escaparate que éste. Y respecto a lo del voto en blanco, su buea intención suele desvanecerse como un azucarillo frente al sistema de D'Hondt. Un beso.

Amor dijo...
20 de mayo de 2010, 23:35

Yo voy a hacer un voto performance, no sé, voy a meter en el sobre un papel de chicle, o a llevarme un rotulador rojo y escribir en la pepeleta: ESPERADME SENTADOS o QUE OS VAYAN DANDO... No se, algo se me ocurrirá.

Anele dijo...
21 de mayo de 2010, 0:12

No me gusta nada que me ponga deberes que ya me los pongo yo.
Gracias en cualquier caso por la información.
Me la leí en su momento. Y la volveré a leer en su momento.

La Ley Orgánica 5/1985 del Régimen Electoral General recoge en su capítulo III las normas que rigen el recuento de votos y su posterior asignación de escaños.

En cualquier caso imaginas que pasaria si del 100% que votamos, un 75% votara en blanco.

Da igual la ley...¿Te lo imaginas?

Por cierto ya lo dije por ahí y lo vuelvo a decir, me parece la mejor prueba de castigo que les podriamos dar.
Por estas cosas del destino, este estupendo libro cayó en mis manos:
"Ensayo sobre la lucidez" Saramago.

Aunque ahora me viene a la cabeza, no recuerdo a ciencia cierta que en la votación en Cataluña para el Statut sólo voto entre 48 o 49% de la población. Es decir al 50% restante se la traía al pairo...y ahí está.
¿Qué repercusión politica y social hubiera o hubiese tenido si ese 50%
hubiese o hubiera votado en blanco?
¿La misma que una a población inexistente? Sinceramente no lo creo.
Vivimos en un sistema donde los números son utilizados de manera encarnizada. Hagamos de nuestra indignación un NUMERO CUANTIOSO, SONORO Y REVOLUCIONARIO.

¡¡¡VIVA EL VOTO EN BLANCO!!!

Palabro de verificación: comativa...jajajajajaja....
;)ponle una ß.

Dos besos

J. dijo...
21 de mayo de 2010, 14:55

Amor: He sido un par de veces presidente de mesa electoral, y te aseguro que tus propuestas no se acercan an cuanto a mala leche ni de lejos a otras "performances" que me he encontrado en algunos sobres. Un cacho de papel higiénico usado es una de las que me vienen a la cabeza.

Anele: No voy a ser yo el que dude que sabes de sobra lo que escribes y por qué lo escribes. Y hay deberes mucho más divertidos que enredarse en leyes (no hay más que pasarse por tu blog para hacerse una idea). Lo triste es que aunque TODOS votáramos en blanco, a nuestra clase política se la traería al pairo y seguirían a lo suyo. No gobiernan para nostros, sino para ellos. Gracias por volver por aquí. Un beso.

Amor dijo...
21 de mayo de 2010, 15:11

Ay, dios, si es que soy una ingenua!

J. dijo...
21 de mayo de 2010, 15:30

Amor: La ingenuidad es una hermosa virtud en estos tiempos que corren.

Desclasado dijo...
21 de mayo de 2010, 17:39

Anele: es lo que dice J. Es inútil el no votar o el votar en blanco, con que se votasen los políticos a sí mismos darían por válido el resultado y nos lo comeríamos el resto.
No quiero hacer derrotismo, es sencillamente no insistir en fórmulas que no funcionan. En bastantes votaciones, sobre todo en USA, no se llega ni al 50% de votantes: se la sopla, "la democracia ha hablado" y bla bla bla.

Anele dijo...
22 de mayo de 2010, 12:32

No estoy para nada de acuerdo. Jamás se ha dado el caso de que toda la población que no va votar. VOTE EN BLANCO.
VOTO EN BLANCO. YA
Claro que a lo mejor resulta mejor no hacer nada, escribiendo panfletadas muy lúcidas.

;)

Desclasado. Saludos
¡¡¡¡ IR A VOTAR¡¡¡¡ EN BLANCO¡¡¡

Joer, y si nos vamos a mi BLOG...aquí y allí..

Os lo digo en confianza. Realmente estoy hasta los cojones de que nos quejemos y no hagamos nada. No os dais cuenta...QUE HAY QUE HACER ALGO. ¡¡OSTIAS!!
A mí lo único que se me ocurre es eso.
Lo de comprarme un rifle de asalto y matar hijos de puta lo dejo para otras culturas....

Desclasado dijo...
22 de mayo de 2010, 14:37

Anele: tu blog es demasiado sensual para hablar de política. Bueno, el que he visto es el que abres y te topas una china en kimono abierto y he pensado en todo menos en política.

En serio: el sistema está totalmente preparado para que vote el 10% de la gente y dar por válido el resultado, independientemente de que el 90% restante vote en blanco.
El "panfleto lúcido" que en casa de J. irá por él, no lo desprecies que puede abrir muchas mentes (o pocas o ninguna, pero algo es ya).
Medidas activas para tomar hay, no es este el foro adecuado para soltarlas. Pero son medidas "extraestatutarias", mientras te ciñas a los mecanismos que el sistema da por válidos, por "democráticos", lo más que conseguirás en verte envuelta en procesos judiciales de años, gastando tiempo y dinero.
Vuelvo a lo de antes: mecanismos que no funcionan, inútil seguir insistiendo en ellos.

Anónimo dijo...
22 de mayo de 2010, 14:43

Hola, buenos días J:

Has hecho un buen resumen.
(No digo más).

Nos "vemos".

J. dijo...
22 de mayo de 2010, 15:36

Anele: Sé que no estamos de acuerdo. Es nuestra línea habitual. Y arengar al voto en blanco no me parece más efectivo que lo de los panfletos. Como te he comentado en tu blog, no creo que la solución a esta mierda de sistema llegue desde el sistema, pero me da que este debate no nos lleva a ninguna parte más allá de un juego de buenas intenciones.

Desclasado: Yo panfleteo, tú panfleteas...

Necronomicón.net: Buenas, Necro. Tienes pagada una caña donde quieras.

Anele dijo...
22 de mayo de 2010, 20:45

Desclasado mi blog azul. Jomio.
Saludos a todos.
Hola Necro¡¡¡

Anele dijo...
22 de mayo de 2010, 20:45

Si lo que vosotros digais pero no me aportais ni una sola alternativa...insinuais....y no soy adivina.

Vivimos en el sistema. Es lo que hay. No creo para nada en los extremismo es la mayor prueba de estupidez mental que conozco.

Además lumbreras telepáticas nunca se ha dado el caso, del voto en blanco.
Claro que quizas para algunos sea más facil arrasar con todo y empezar de cero.
Qué para las novelas de ciencia ficción está muy bien y tal, pero para nada más.

En cualquier caso no creo en la anarquia. La civilización necesita lideres.

Belén dijo...
23 de mayo de 2010, 10:25

Buf... este tipo de post me hacen recordar que quiero vivir en una cueva y no pensar en nada de sociedades...

besicos

J. dijo...
23 de mayo de 2010, 20:25

Anele: Yo me hice anarcoprimitivista una vez.
http://labioscomoespadas.blogspot.com/2010/01/somos-la-mierda-cantante-y-danzante-del.html

Belen: Cuidao con los alibabases de las cuevas.

Anónimo dijo...
24 de mayo de 2010, 10:39

Da miedo pensar que estamos en manos de unos pocos ambiciosos sin medida. Todo es mentira. Los que deben controlar se dejan comprar por los controlados y reina el descontrol.

Lo peor es que en este nuevo estado feudal, como en el antiguo, los de abajo pagan los platos rotos.

Un abrazo, muy buena la síntesis, que no es fácil resumir como lo has hecho el texto.

Desclasado dijo...
24 de mayo de 2010, 14:37

Me bajo del burro, Anele: ciertamente nunca se ha probado lo de votar masivamente en blanco. Y además no tengo soluciones, sólo quejas.
Ah, entré en el blog que vi "Anele".

Saludos.

Anele dijo...
24 de mayo de 2010, 21:43

Lo del Anarcoprimitivismo es de tertulia pero por aquí es un coñazo se lo digo a ambos dos.
Habría mucho de lo que hablar...pero levantarse a plantar (lo que sea) por una libertad imaginada cuando sale sol. 365 días al año y los callos en la manos....no sé, no sé...
Lo sé quizás lo he simplificado demasiado, pero tengo esa pequeña mania.

;)
Saludos

Ustedes todos no sé que van hacer en la próximas. YO VOTARÉ EN BLANCO.

Anele dijo...
24 de mayo de 2010, 21:45

....¡¡¡¡j!!! lo del anarquismo y tal....y la moderación de coments...

Un beso,
Qué estoy de buen rollo.

;)

J.Lorente dijo...
25 de mayo de 2010, 3:27

Llego tarde, ya lo sé, pero el tiempo no me sobra.

No sé si he disfrutado más con la entrada o con los comentarios... Lo cierto es que se trata de un tema que a todos nos atañe y muy pocos nos planteamos (Es lo que nos han enseñado)

Como prácticamente está todo dicho, sólo añadiré que... Como borregos votamos lo que quieren que votemos y como borregos aceptamos lo que nos mandan. Y si nos "obligan" a gastar lo que no tenemos, como borregos lo gastamos. ¿O quién no se ha sentido una Mierda porque no tenía un piso propio, un coche de puta madre o una tele taco de grande?

Que levanten la mano todos los que hayan conseguido una hipoteca con todas las facilidades posibles... BIEN.

Ahora que levanten la mano los que aún no hayan terminado de pagarla... COÑO, CASI TODOS.

Y por último, que levanten la mano los que sigan teniendo esas facilidades que le prometieron... ¿HAY ALGUIEN AHÍ?

Un Saludo a todos.

J. dijo...
25 de mayo de 2010, 18:00

Anele: La autosuficiencia tiene un precio, y mejor los callos en las manos que en las ideas. Otro beso para ti.

J. Lorente:Tú nunca llegas tarde. Sólo te gusta que te hagan de rogar ;).

Gracias por la visita y los moderados comentarios.

Pilar Mandl dijo...
27 de mayo de 2010, 12:37

¡Qué barbaridad! cuando te pones. Te pones... no he podido leerlo de un tirón... (es broma).
Me gusta mucho la viñeta de la cabecera...

J. dijo...
27 de mayo de 2010, 14:14

Pilar Mandl: Muchas gracias por volver y por leer la entrada (entera). La imagen corresponde a la expulsión de los mercaderes del templo, más o menos al momento en el que Jesús los corrió a gorrazos. Un beso.